La legitimación y el comportamiento social
- Esteban Ayala
- 30 mar 2021
- 2 Min. de lectura
El humano es identificado como un animal social, que relaciona todas sus experiencias y expectativas de acuerdo con un círculo colectivo o relacional en cuanto a diferentes entornos, desde el familiar al social, relacionando sus comportamientos a partir del colectivo, identificando objetivos tanto éticos como morales de acuerdo con las creencias e intereses del grupo (Cegarra, 2012). La legitimación hace referencia a los comportamientos negativos o positivos que se normalizan al ser parte de estos mismos, implementando “normas” que favorezcan la ocurrencia de estos comportamientos que en su mayoría van en “pro” del bienestar del “equipo”.

Por esto mismo se generan una serie de normas o relaciones de acuerdo a los marcos normativos de un grupo, estableciendo una serie de patrones aceptados socialmente, en el grupo social cercano; sin embargo estas normas no siempre están a favor de la comunidad externa a este grupo, afectando a los otros en cuanto a las “reglas” que se implementan como parte de esta misma; por ejemplo, se han identificado comportamientos que “apoyan al grupo” en comunidades de asaltantes, en las que prima el “bienestar” del mismo grupo; haciendo que los comportamientos que tienen hacia las personas ajenas de este, sean victimas de agresiones o daños generados por el grupo que adopta este tipo de intereses.
Este tipo de comportamientos se demuestran no solamente en grupos creados desde cero, pues muchas veces las relaciones sociales como familiares influyen en este tipo de “éticas colectivas” que apoyan el bienestar de una comunidad en concreto, haciendo que otras comunidades sufran, o sean víctimas de agresiones por no ser parte de ellas (Guzmán, Barozet & Méndez, 2017); sin embargo la familia y el campo social no solo hacen parte de este tipo de situaciones, pues es importante mencionar que el adoctrinamiento religioso o educativo hace que se generen una serie de comportamientos en pro de la sociedad con la que se comparte un interés en común.

No obstante, se identifican patrones que desfavorecen la ocurrencia de comportamientos prosociales, entre ellos la paz, haciendo que la legitimación y el interés individual (o del endo grupo) no se separe a los intereses de una población general, haciendo que muchas veces sea de mayor interés el beneficio propio y prime ante los derechos del exo grupo, haciendo que su propia opinión sea la más tomada en cuenta para una comunidad.
¿Qué opinas de este tema?, ¿en algún momento has reflexionado sobre los comportamientos que favorecen a tu grupo social mas cercano y que alejan a los demás?, recuerda comentar y suscribirte a nuestras redes sociales, somos Health Psic #CrecemosContigo.
Referencias
Cegarra, J. (2012). Fundamentos teórico epistemológicos de los imaginarios sociales. Cinta de moebio, (43), 01-13.
Guzmán, V., Barozet, E., & Méndez, M. L. (2017). Legitimación y crítica a la desigualdad: una aproximación pragmática. Convergencia, 24(73), 87-112.
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